Our Motto:

We yell because we don't care

martes, 29 de mayo de 2007

Diario de un moribundo (I)

Hace unos meses, cuando parecía que Flaigrod iba a agarrar brío, un día trece, hice esta entrada. Después vino... lo desagradable, y ya no pude seguir con la idea de hacerle una historia a cada portada que me encontrara. Hace unos día publiqué la historia No. 2 de ese post en un foro. Inrcreíblemente, gustó. A mi también me gustó que gustara.

Animado por ese "éxito", he decidido darle a esa anécdota de Flaigrod un poco más de dignidad. Quédense con el proncipio, recién salido del horno, todavia sin pulir, de esta historia.

***

Ivan despertó. Fue al baño. Dos metros y treinta y cinco centímetros lo separaban de la puerta, empotrada en el falso suelo de su apartamento. El piso real estaba a doce metros de distancia. Así, flotaba hacia el lavabo, y abrió la llave del agua. Moles de moléculas de agua pasan por el grifo todos los días, y no me había dado cuenta. Sacando cuentas mientras me lavo la cara. Si todos los habitantes de Flaigrod abrimos nuestras llaves al mismo tiempo, y jalamos las palancas de nuestros excusados, ¿en cuánto tiempo nos quedaremos sin agua? ¿De donde viene el agua que moja mi cara? ¿Volverá a su lugar? Ahora la barba. ¿Podría crecer hasta mis pies? ¿Cómo me vería flotando en este apartamento con mi barba de gnomo? ¿Me podría cubrir con ella en mi recámara aérea? ¿Cómo tomarían los transeúntes de abajo a un ser volador que se acurruca en sus propias barbas? ¿Creerían que domina la alquimia de los reactores nucleares? ¿Cómo ven a los reactores nucleares? ¿Como fraguas alquímicas? ¿Confiarían en gnomos para que cuiden los reactores? ¿Y si las barbas se nos atoraran en el mecanismo y lo hicieran estallar? No creo que nadie estaría contento con eso. Yo sí confiaría en gnomos, por lo menos tienen magia y oro. ¿Qué más puedes pedir?

Arreglado y listo, me deslizo por mi jaula de concreto hasta la cocina. ¿Puedo caminar sólo deslizándome? A ver (el sonido de los zapatos despertó al inquilino de abajo, justo a tiempo). ¡Oh, no! Los zapatos son nuevos, se van a gastar. La suela cae, un fino polvo es desprendido de todas las cosas. Debería detenerme, o podría destruir algo. Debería quedarme aquí encerrado, o alguien me destruirá. Yo mismo me desmorono a cada momento, así que no importa, sigamos adelante, pero lentamente (el inquilino de abajo había salido por la puerta de su hogar, y se dirigía corriendo a desayunar. “Rápido, adelante”, era lo único que creemos cruzaba por su pequeña mente).

El olor del aceite en la sartén es delicioso. No se puede hacer nada bueno sin calentarse primero, cuestión de catalizadores. ¿Alguien se habrá envenenado con el peltre de las ollas? El polvo que se despide de estos cubículos de Paracelso en particular es particularmente tóxico para nosotros los gnomos flotantes, atrapados en estas cajitas sin ventilación, que están… ¿colgadas del suelo? En todo caso, no quiero saberlo. No quisiera caerme al cielo, porque no tiene fin. ¿Puede algo caer sin fin? Tú sabes que no, Dr. Chacsvlckask. Sabes que le mientes a tu cerebro. Al menos, me divierto sin tener televisor (cerca, muy cerca de allí, el inquilino casi llegaba a su cita. “Rápido, adelante”, estaba tatuado en su interior como una sola llamada, el único objetivo de su existencia. Era como un color que iluminaba sus entrañas, un gas que ocupaba todo su espacio disponible. “Rápido”, decía la voz antigua de la necesidad. “Adelante”, ordenaba un espectro informe desde lo profundo de su pensamiento, la personificación de la vida).

Está listo. La flama se apaga. ¿Cómo algo que estuvo vivo alguna vez se convierte en el combustible de alguien y en el alimento de otro? Los helechos del carbonífero son quemados para obtener calor en esta era, y los pollos difícilmente son encontrados en estado salvaje, creo. ¿Somos los dueños del mundo? Creo que eso dice que sí, aunque parezca arrogante. Ahora, como amo y señor de mi cubículo cósmico, quiero mi desayuno. ¡Te lo ordeno, brazo, sirve la comida! ¡Tu, servilleta, ven! (El inquilino había llegado a su destino. “Arriba, rápido”, ordenaba el instinto. El problema era el obstáculo, grande y negro, que había frente a él). No se necesita ser un gnomo para hacer magia. Toda la magia que necesito está aquí.

Ivan pisó el suelo en un ademán de fuerza y poder sobre las criaturas que pululaban bajo sus pies. Fue tan fuerte que el suelo crujió. Levantó el zapato, y vio a un ser maltrecho, muerto, retorciéndose confuso en un mar de sensaciones nunca antes sentidas. El dolor llegaba a cada rincón de ese cuerpo marchito, doblegado por las ineludibles corrientes del destino. Su mirada era vidriosa, sus ojos miraban perdidos a la eternidad, que lucía como un punto difuso de luz que se alejaba cada vez más, dejando paso a la soledad, al frío, al silencio, a la muerte. También vio a una cucaracha aplastada (“Arriba, adelante, atrás, atrás, atrás, atrás…” La orden del capataz invisible se perdió en la nada. La nada de las cucarachas es más absoluta que la de los hombres, pero en ese momento, Ivan Chacsvlckask no parecía interesado. Los gnomos, la energía nuclear, las alegorías de murciélagos y de divinidad hogareña, todas sus ensoñaciones y posibles ideas se perdieron, dando paso a la realidad, el objeto que estaba bajo sus pies, y que desde ahora, jamás abandonaría. Porque desde ese momento pertenecía de nuevo a la Tierra. Desolación, incertidumbre, y profundo pavor, era lo que había tomado el lugar de sus fantasías. El golpe de la realidad dolía mucho. ). Dolor, dolor y muerte, muerte inminente, detrás, adelante, “Adelante, rápido”.

jueves, 24 de mayo de 2007

Propósito de año nuevo

Al momento de empezar esto (22 de Mayo de 2007), faltan siete días para que concluya el mes, y voy muy atrasado con el propósito de Año Nuevo, gracias en parte al sopor general de los primeros días de clases (más todavía en este mes de puentes), y en parte porque vuelvo a tener computadora y el Internet hace estragos conmigo.

No voy a dejar de fumar (no fumo), ni de tomar (no bebo), ni de comer (ídem), ni me metí al gym (aunque debería). No me preocupo mucho por mi persona. En lugar de eso, me hice el propósito de leer un libro por mes, doce en el año. Más o menos eso era lo que leía cuando era más joven. Me di cuenta de que eso era uncool y lo dejé. Luego me enteré de que los videojuegos eran cool y lo sustituí por eso, y luego por el Internet (obviamente, no sé diferenciar los consejos buenos de los malos). Leer doce libros en un año no es nada complicado. Solamente es cuestión de saberlos escoger. Estos son los que he escogido. No les voy a contar nada de la historia de ninguno para que vayan y los busquen.

Enero: Hyperion

Entre mis manías más absurdas está el hacerle caso a las listas de lo que sea. No dejo de ser un nerd. Entre mis defectos más notorios está el ser indeciso, y consumir mi dinero en un abrir y cerrar de ojos. Los tres juntos crean a un ser que caza ofertas de cosas sobresalientes, un buscador de clásicos, un devorador de talentos. Hace tres años tenía una disyuntiva: comprar El juego de Ender o Hyperion. Los dos son libros de ciencia ficción sobresalientes. Decidí según la posición en una lista que vi hace mucho. Me equivoqué. En enero compré Hyperion, y me pregunté cómo había caído en esa trampa. Es un libro muy entretenido, pero está a la mitad.

Febrero: La caída de Hyperion

Como Hyperion estaba partido por la mitad, la elección lógica era conseguir la otra mitad. Creo que era el único ejemplar que quedaba en toda la ciudad, y estaba sepultado en una mesa de una tienda de autoservicio. Como el otro, fue muy entretenido.

Opinión: Con estos dos libros me doy cuenta de que los otakus son nerds con la mente muy débil. La ciencia ficción buena, la que viene en estos libros extraños y únicos, es para los nerds de caché, de los que quiero formar parte. Si lo tuviera que emparejar con un ánime, es como Evangelion, pero en demente. (*****)

Marzo: Las Uvas de la Ira

Hace muchos años leí un fragmento de este libro en un compendio de historia contemporánea. De alguna manera, el nombre se me quedó grabado en la mente, tal vez porque la página que leí era brutal. En mi viaje a Monterrey encontré tres librerías en dos cuadras, y eso para mí, con dinero y sin supervisión, era muy tentador. Entre las repisas encontré este libro, y junto con el libro de abril, fueron mis mejores souvenirs.

Opinión: Es una historia cruda, contada de forma muy sencilla. Es un buen ejemplo de las lecturas que hacía cuando era niño, o sea sin saber qué iba a empezar a leer. Para los morbosos y para los “rojos”.(***)

Abril: Los Hermanos Karamazov

El otro libro que compré en Monterrey es otra de mis compras compulsivas. Una vez lo quise comprar por Internet, pero nunca llegó el pedido y siempre me lo recuerdan aquí en la casa. Otro ejemplo de mis lecturas pasadas: los grandes maestros del siglo XIX, aunque a mis diez – trece años no entendiera ninguna palabra. Lo leí en vacaciones y no tiene más anécdotas

Opinión: Los libros de Dostoievsky son raros. Te trae de acá para allá, te mete en los pensamientos de los personajes, todo parece una pesadilla, o por lo menos, como si te los contara un ser con telepatía. Por eso son difíciles de seguir, aparte de que le gustaba filosofar. Creo que en algún momento lo voy a tener que volver a leer. (****)

Mayo: Ana Karenina

Por alguna razón los kópeks me atraen. Éste lo tenía arrumbado en el ropero porque pensaba que se trataba de un resumen y no del libro real (junto con la mala impresión y traducción, uno de los peligros de cazar ofertas). No quería tener basura en mi ropero, así que lo confronté con una edición a todas luces confiable. Pasó la prueba y empecé a leer.

Opinión: No he terminado, y por eso no puedo dar una opinión sin contar la historia, cosa que no voy a hacer. Lo único que puedo decir es que es más fácil que Dostoievsky, y que la trama está muy bien hecha, pero eso es obvio, estos tipos tienen monumentos en su honor y los que saben les dedican escritos sobre la forma en que acomodan las palabras.

Junio: ¿?

Faltan siete días para fin de mes y no tengo dinero para el libro de junio, así que voy a tener que agarrar uno de los que no acabé de leer, que no son pocos. ¿Crimen y Castigo? ¿Adiós a las Armas? ¿Ulises (noooooo!)? Quién sabe. Por lo pronto, debo de ir juntando para el de julio, y pedir/comprar algo realmente especial en agosto (mi cumpleaños es el 11). Luego pongo los libros que más me han gustado, idea cortesía de T3mo.

martes, 22 de mayo de 2007

En la antigüedad…

…uno podía creerle a la televisión con los ojos cerrados, tal vez porque era la mass-era, la era de las multitudes. Hoy, que es la era de los individuos, no sólo no es posible, sino que es de buen gusto no hacerlo.

Hace algunos meses, en los anuncios de las campañas políticas, salía AMLO comparado con Hugo Chávez, como una forma de “hacer consciente” al teleauditorio acerca del “peligro” que representaba volver al autoritarismo, cosa que “pasaría” si votábamos por el candidato con amor desaforado. Hoy, en las noticias, ante una revisión a la ley que regula a las emisiones de radio y televisión, se dice que esto llevaría a un retorno al pasado, y nos muestran el ejemplo de Venezuela, otra vez. Me pregunto qué piensan los venezolanos. El “peligro” radica otra vez en volver al autoritarismo del PRI (corte a: tomas de ex – presidentes en esas ceremonias fastuosas de adoración pública al Ejecutivo).

Aquí empiezo a sospechar. ¿Y si el señor S. P. no es el mártir de la libre empresa que Te Ve Olmeca nos retrata? ¿Y qué tal si al Teacher le dicen qué decir, y mientras muestra esa máscara de objetividad inexpresiva nos oculta la verdad? Hace algunos meses hojeé una revista en el Sanborns de la que arranqué la idea de que cuando traen una cosa a cuadro mucho, y por mucho tiempo, la televisora gana algo con ello. Llámenme ingenuo (o por lo menos a mi yo del pasado), pero no era capaz de concebir tal ultraje. Pasé, como casi todas las personas allá afuera, mucho tiempo anestesiado por la TV. Ahora nada más veo los Simpson, pero es más un complemento de la cena que una droga.

Lo malo es que contra los políticos la TV tiene dos armas muy poderosas: el dinero (obvio) y el videotape. El único que puede escapar a ese poder es un político intachable, que nunca haya hecho nada remotamente ambiguo en ninguna forma. Como eso no existe, en cuanto uno quiere hacer una acción en contra de ella, le sacan la investigación, o ya de plano, el cheque (esa gente no usa efectivo). Quien controla la información controla todo, y en este México, las televisoras tienen gran parte de esa “información”. Con su ubicuidad, pueden hacer la ficción realidad y convertir la realidad en una caricatura. Tienen la facultad de decidir qué es importante y qué no. Lógicamente, pueden torcer la vida a su antojo y “obsequiándonosla” en una forma blanda y muy condimentada, donde lo rojo es ROJO y lo dulce es duuuuuulceeeeee, algo que ningún otro medio puede lograr. Yo mismo al estar viendo la nota introductoria del desHechos M. no podía dejar de sentir un sentimiento de aprobación hacia lo que se me ofrecía en esa cápsula de noticias. Mi cerebro reptil se indignaba ante los senadores que aparentaban defender los bienes de la nación cuando en realidad eran unas fichitas, y clamaba justicia. ¿Para quién? Me asombra decirlo, pero juro que digo la verdad y lo pensé por un instante: para TeVe Olmeca. El aparato de relaciones públicas denominado “noticiero” funciona. No digamos que todo lo que nos dicen es mentira, sino que nos muestran lo que es “correcto”. Lo ROJO.

miércoles, 16 de mayo de 2007

Cosas de nerds - Linux versus Windows (Borrador) (¡!)




¿Por qué no tratan de llevarse bien?


En el mundo computacional, como todo en el mundo, hay dos posiciones antagónicas e irreconciliables: los del “free software” y los del “normal software” (esos en realidad no tienen nombre). Como en todo en este mundo, si no estás con uno de ellos, eres su enemigo, y si no estás con ninguno, tratarán de hacer todo lo posible para manipularte (por alguna razón me acordé de aquella película de Cantinflas, la de “Su Excelencia”). Yo no tomo partido por ningún bando, no aún. La cuestión es ésta:

- Los del Free Software, o “linuxeros”, dicen que el software que corre en nuestras compus debe ser libre, es decir, que cualquiera pueda modificarlo y/o distribuirlo a voluntad, no como esos sucios capitalistas de Microsoft que nos tratan como máquinas de compra.

- Los del Normal Software, o “status quo”, dicen que el software debe seguir siendo propiedad intelectual de las empresas y los programadores para mantener la calidad, no como esos ilusos “hippies” que quieren que volvamos a la época del Do It Yourself.

La gran pregunta es ¿quién tiene la razón? Yo no lo sé. Lo que sigue es la opinión personal de un servido basada en su (a veces amarga) experiencia. No me meteré en cuestiones técnicas porque no las conozco, y trataré de que mi

Uno tiene las dos opciones frente a sí, y el hecho de que una computadora, a pesar de que están ya en todas partes, sigue siendo un artifundio mucho muy tecnológico y complejo, y eso que los ingenieros se han partido el lomo los últimos cuarenta años para hacernos la vida más sencilla. Cuando uno tiene ante sí una computadora por primera vez, siente una especie de temor y reverencia casi místicos, y una aprensión terrible a tocarla, no vaya a ser que la descompongamos. Por suerte para nosotros tenemos a Microsoft y a Windows, que nos “solucionan” la vida, al venir preinstalados en la gran mayoría de los equipos. De hecho, sólo he visto dos veces una computadora nueva con otro sistema: en una exhibición de Apple en Monterrey y unas máquinas que llegaron a la escuela con el sistema de allá arriba: Lindows OS.

Donde esté una computadora y un usuario común y corriente, está un producto de Microsoft. En las escuelas nuestras clases de computación comienzan por el escritorio de Windows. Hacemos nuestras tareas en el Office, porque en eso nos enseñamos. Entramos a Google en el Internet Explorer porque es lo que hay. Un minuto. ¿Es “lo que hay” o es “lo que nos dan”? Aquí hay un fenómeno curioso. Resulta que Microsoft no es todo lo que hay. Está Linux, Solaris, hasta las venerables y siempre deseadas Mac. Entonces, ¿por qué no elegimos entre estos sistemas de software? Porque no nos han enseñado más allá del cubil de Windows. Y es fácil quedarse en él sobre todo en esta era de discos piratas que se reparten por todas partes de manera tan fácil que allá en las oficinas de los desarrolladores de software se devanan los sesos buscando formas de que eso no suceda. Eso, sin embargo, va más allá. Pienso que el abrumador éxito de Windows se debe precisamente a que no conocemos más allá de sus fronteras. Mucha gente cuando piensa en “computadora” piensa inmediatamente en “Word”. Probablemente no sepa que exista OpenOffice, que es gratis o Word Perfect, que es de paga pero cuesta mucho menos que un Office original. Eso no importa, porque casi nadie compra un Office. Por lo general viene ya en la máquina o nos lo pasa un amigo. Pero como dijera Nelson Rufino: “es un delito que no tiene víctimas”.

Así que después de informarnos nos aventuramos tímidamente en la galaxia del Free Software. Me gustan sus páginas de Internet. Son muy bonitas e inspiradoras, como un comercial del Avon. La promesa en todas esas páginas es que sus programas son gratis de verdad, no gratis como en un disco con crack, sino gratis de que esto es legal y nadie te reclamará. Hasta te alientan a decirles a tus amigos. Bajas el programa, le picas al instalador, y todo marcha sobre ruedas. De vez en cuando te quedarás con una cara de what ante un comando de nombre diferente, pero que hace lo mismo. O de plano te hartarás porque hay funciones que no entiendes en lo absoluto. Cuando instalé el OpenOffice por vez primera, por más que le busqué, no pude configurar el corrector de ortografía. La segunda vez tampoco. Supongo que me falta aprender. Algunos lo logran y están complacidos con su descubrimiento, mientras que otros simplemente lo abandonan. Nadie los culpa. Los más osados hasta se aventuran a cambiar el sistema operativo, y entran a la otra galaxia que se llama Linux, en la mayoría de los casos.

Linux es muy raro. Se ve bonito (ahora), y funciona bien, pero a veces tienes que hacer cosas que simplemente no sabes hacer, como configurar manualmente. Allí, que Dios te agarre confesado si no tienes Internet. Existe un montón de gente que le sabe al Linux, pero pocos tienen la oportunidad de conocerlos en persona: foros y chats son obligados puntos para buscar ayuda. Si tienes suerte y la encuentras, podrás seguir con tu vida con pocos contratiempos. Quizás las dos cosas más shockeantes del Linux sean que tienes que aprender todo de nuevo y que va a haber veces en los que la misma presión del medio te va a obligar a tener Windows. En algún momento de mi carrera voy a toparme con Visual Basic, y ese ni en sueños lo van a tener en Linux. Tal vez en el futuro me cambie y lo haga todo en Java.

Eso es lo que yo he visto. Es poco, porque no tengo tiempo ya. Aunque lo parezca, no estoy del lado de Linux al 100%, eso por algunas razones:

- Me da flojera tener que aprender, y más aún, enseñar a la gente que usa esta computadora.
- No hay nadie que me ayude en persona, no que yo conozca
- A veces, Linux es muy técnico.
- Y ya.

Tampoco estoy del lado de Microsoft:

- Me siento culpable cada vez que pienso de dónde vino mi copia de Windows.
- A veces, funciona muy mal y no te deja hacer cosas fuera de los menús y ventanas.
- Se aprovechan de su posición para seguir allí (eso fue muy “rojo”. Me disculpo).
- Y ya.

Por lo visto, en esto también soy un indeciso. También me hace falta abundar más (¡!), pero por respeto a su paciencia no lo haré. Mientras tanto, les dejo dos panfletos “hippies”:

De cómo Microsoft nos usa como empleados
De cómo Microsoft nos lava el cerebro

Prometo hacerlo mejor la próxima.

domingo, 13 de mayo de 2007

About me

En un afán por tener algo digno qué postear, se me trabó la mente y no pude hilar ninguna idea buena, así que pondo este chismógrafo que me llegó por correo.

1. Nombre Completo

Ramón Ramírez Gárate

2. ¿Por quién te dieron ese nombre?

Mi padre se llamaba así, y su padre.

3. ¿Le pides deseos a las estrellas?

Qué cosa tan más cursi. Prefiero el vudú o la extorsión

4. ¿Cuando fue la última vez que lloraste?

La última vez que vi Children Of Men en el cine, de eso hace como tres meses

5. ¿Te gusta tu letra?

Claro que sí. Me ahorra muchas páginas

6. ¿El pan te gusta y con qué?

Sí, sopeado con leche

7. ¿Cuántos hijos tienes?

Ninguno.

8. Sus nombres y edades

Ya dije que ninguno, y de todas formas, si los tuviera, no diría sus datos en un chismógrafo

9. Si fueras otra persona, ¿serías tu amigo?

Si, si soy una persona muy agradable.

10. ¿Tienes un diario de vida?

Más o menos. No escribo las nimiedades que me ocurren sino las que se me ocurren.

11. ¿Eres sarcástico?

Si, soy un zopilote

12. ¿Saltarías en bungee?

No. No, no, no. Soy un cobarde para esas cosas, y para otras también, dicho sea de paso

13. ¿Cuál es tu cereal preferido?

“Zucaritas©”

14. ¿Te desabrochas los zapatos antes de sacártelos?

Claro que sí, no soy un guarro.

15. ¿Crees que eres fuerte?

Pues no. Si publicara una foto mía, cosa que no pasará en un muy largo tiempo, sabrían porqué.

16. ¿Tu helado favorito?

Combinado de vainilla y chocolate. Es porque soy muy indeciso

17. ¿Cuánto calzas?

La última vez que me fijé, del 10. Creo que ya no hay tenis Converse© para mí, esos son para pies muy delicados y finos, tipo emo.

18. ¿Rojo o azul?

Azul, blanco y negro (nunca los tres juntos, ni el negro en camisetas)

19. ¿Qué es lo que menos te gusta de ti?

Que se me olvidan las cosas, soy obsesivo a la hora de estar programando y eso me trae problemas, soy obsesivo con la hora y eso también me trae problemas.

20. ¿A quien extrañas mucho?

A mi madre, y a los amigos que he estado perdiendo cada vez que me cambio de escuela

21. ¿Te gustaría que todos a quienes les enviaste este mail te lo respondan?

Já, esto no es un mail originalmente, sino un post que voy a poner en un blog. En el argot blogueril eso es un meme, y como no tengo lectores, aunque quiera, nadie lo va a responder.

22. Qué color de pantalones y zapatos tienes puestos?

Un pantalón de mezclilla azul (el No. 3), y unos tenis blancos. ¿Porqué no preguntan por la camisa?

23. ¿Lo último que comiste hoy?

Una sopa instantánea. En domingo no se cocina.

24. ¿Qué estás escuchando en este momento?

“Insistor” – Tapes N’ Tapes

25. ¿La última persona con que hablaste por teléfono?

La esposa de un primo. No uso mucho el teléfono

26 ¿Trago favorito?

Dejando de lado que no bebo, contestaré la pregunta según lo que tomo: Limonada, de agua normal, nada de vodka o ginebra o tequila.

27. ¿Deporte favorito para ver por TV?

Creo que “Mexican Classic Deathmatch”: El Estado de derecho Vs. Todo el resto del país

28. ¿Comida favorita?

Carne asada, y pollo de KFC©. Ummm, transgénicos

29. ¿Película de terror o final feliz?

Con final feliz, porque tengo más de donde escoger y hay demasiadas películas “de terror” espantosas.

30. ¿Última película que viste en el cine y con quien?

Children of Men, con el Alemán, el David y el Jorge.

31. ¿Día Favorito del año?

Navidad: me duermo tarde, hay una buena cena, al final tengo regalos, dinero o ambos, y ¿ya dije que me duermo tarde?

32. ¿Invierno o verano?

Invierno. No me gusta gastar mi dinero en agua para beber, siendo que deberíamos poder beber toda el agua que quisiéramos, y no sólo la que viene en presentación de 1 l. o que nos reta a tomarla

33. ¿Besos o abrazos?

Abrazos, porque los besos son más comprometedores.

34. ¿Postre preferido?

Galletas de cualquier tipo

35. ¿Quién crees que te responderá?

Nadie, creo.

36. ¿El que menos crees que lo hará?

Yo, porque ya contesté esto

37. Qué libro estás leyendo?

Ana Karenina, de León Tolstoi.

38. ¿Qué hay en tu pared?

Diplomas, como nueve posters de videojuegos y pintura azul

39. ¿Qué viste anoche en la tele?

El box (mi hermano no me dejaba pegar pestaña por la tele prendida y pues me tuve que aguantar.)

40. ¿Rolling Stones o Beatles?

Beatles!!!!!

41. ¿Dónde es lo más lejos que has estado de tu casa?

Monterrey

42. ¿En quién piensas ahora?

En nadie en particular. Por lo general mis pensamientos no giran alrededor de las personas. Tal vez por eso se me olviden tan fácilmente los nombres; aunque teniendo que elegir, quisiera pensar en el que escribió esta cadena en particular.

43. ¿Hay algo que le quieras decir?

Sí: Para la otra escribe bien, maldito bastardo. Todas las preguntas tuve que corregirlas porque tú no te acordaste de que en el idioma español se abren y se cierran las interrogaciones. Soy muy obsesivo con eso, aunque me traiga problemas.

jueves, 10 de mayo de 2007

Impresiones de un ex - pesimista

¡No quepo de contento! No hay palabras para describir lo que siento, así que puedo decir que estoy estrubujuástico y resarchido de felicidad.

Malas nuevas: mi nueva compu es muda, porque no he podido instalar el cochino driver de sonido. Buenas nuevas: ¡Es una compu! ¡Estoy escribiendo esto! Hay que ver lo bueno en lo malo. Malamente, lo que falta es algo bueno, pero que bueno que todavía no pasa nada malo, como un virus o que corten el Internet. ¡Hurra! Ahora quiero ser un buen chico, y dejar mis malos hábitos. Por eso instalé un reloj para que me marque cuando me pase de tiempo. Como no tengo sonido, hice un letrerito en C, para que me avisara. Lo malo es que uno de los malos hábitos que tengo es instalar cochinadas, como una distribución linux sin saber cómo funciona. Pero lo bueno es que me evitará malentendidos familiares (en casa todos los aparatos electrónicos y los cerebros se deben apagar a las 10:30 máximo). Total, es fin justifica los medios. ¿Por qué puse una frase así en un asunto tan trivial? Tal vez para parecer interesante.

Orgía de tests!

La ociosidad es mala. Me he pasado casi una hora contestando tests nerd. He aquí los resultados (en inglés):

I am nerdier than 57% of all people. Are you nerdier? Click here to find out!

No soy tan nerd. Algo para celebrar.


I am 52% loser. What about you? Click here to find out!

No soy un loser. Otra cosa para celebrar.


StupidTester.com says I'm 21% Stupid! How stupid are you? Click Here!

Soy "bonito listo" Estos extraños gringos. Este es un día memorable.


www.drunktests.com The Drunk Test

Obviamente mi concepto de celebración difiere del de la mayoría de las personas.


What is your weird quotient? Click to find out!

La verdad no supe bien qué significa este coeficiente de excentricidad. Hay un veititantos por ciento de tipos más locos que yo, y un cincuenta y ocho por ciento más cuerdos.

NerdTests.com User Test: The Halo Ultimate  Test.

Halo? Puaj.

Me gustó el de Nerd, el de raro y el de tonto. Lo bueno es que no soy tonto. Por cierto, este es el post 41. Uno más, y les muestro… el sentido de la vida (¿qué, creían que les iba a mostrar algo por ser el post 41?). Es bueno estar de vuelta, y ganarle al timer!

martes, 8 de mayo de 2007

Sin más que decir mas que...


... tengo compu otra vez!
(Es normal, no como esta con personalidades múltiples)

miércoles, 2 de mayo de 2007

Reciclaje

Aquí dejo dos balbuceos que escribí hace algún tiempo. Espero que no los haya posteado ya, eso sería bochornoso.

La trompeta del heraldo suena en todo el salón. Es un momento solemne. La ceremonia da inicio. Los invitados miran al iniciado con rostro severo. Sus ojos son pozos de oscuridad. El iniciado da un paso al frente. En el altar, el gran maestre de la Orden unge al hombre nuevo. Los misterios de la vida detrás de la vida le serán revelados… a su tiempo. Lady B*** toca con su anillo de rubí la frente del aprendiz.

Los grandes misterios, es en todo lo que puede pensar el alumno. Un rumor empieza a invadir la sala: algo agita a los asistentes. “¿Dónde está el aprendiz, el nuevo hermano, el nuevo hombre?”, pregunta Lord T*** Nadie puede contestar. Los hermanos guardianes comienzan a registrar cada habitación de la cofradía. No está. De repente, en el estudio del Gran Maestre se escucha un ruido ahogado. Los guardias corren, y encuentran a Lady B*** en el piso, inmóvil, sin su anillo.

En el sótano, el tenue fulgor de las antorchas alumbra el camino de los cofrades, presurosos de llegar a la puerta de la Luz y la Verdad. Está abierta de par en par. Los gritos de terror inundan la cámara. Nadie había visto al aprendiz, detrás de la puerta, ni cuando la cerró. El gendarme ve en su mano el anillo de Lady B… refulgiendo con un brillo rojo. Ahora los misterios del universo están ante él, pero no en la cámara de la Luz y la Verdad. Ha descubierto la ambición, y con ella la culpa. Aquella gente le abrió los brazos, y él había tomado un hacha mohosa y se los había cortado, pero no importaba. El castigo de los herejes era aún peor.

***

- ¿A dónde vas, Grunmmel?
- Al país del oro.
- ¿Y podrás llegar?
- Claro.
- ¿Para qué es el bastón?
- Para nada en especial. Sólo me hace ver más interesante.
- Ah, ya veo. ¿Así que te vas de aquí por que quieres sentirte importante?
- No. Quiero irme para hacer algo importante.
- ¿Se puede saber qué?
- Dejar de preguntar.

El viejo Grunmmel estaba exhausto. Estaba parado al lado del camino, solitario, en la pradera. El océano aquí ya era dorado, claro, si uno imaginaba que la hierba seca que se dejaba mecer delicadamente por el viento era un mar de oro. Él podía. Casi no podía ver, y así, logró sentirse golpeado por las olas de este áureo lugar. “Falta poco”, pensaba.

- ¡Grunmmel, eres tu!
- Sí.- ¡Mírate, pero si estás hecho una ruina!
- Lo sé.
- Bueno, a ver, ¿Dónde está el oro?
- …
- ¿Ves, qué ganaste con irte?
- …
- ¿No vas a decir nada, eh? ¡Pues adiós!
- Espera.- A ver, ¿ahora qué quieres?
- Toma. No sé si existe el país del oro. Creo que me desvié.
Grunmmel abrió su morral. Sacó algo y lo puso en las manos de Silas. Las perlas eran hermosas, pero Silas no pudo preguntar de dónde venían, pues el viejo se había ido otra vez.

***

Hoy volví a clases, con lo que mi vida vuelve a tener sentido. Aunque sería mejor si tuviera me compu de vuelta. El que está de vuelta es mi personaje en Oblivion, porque empezé la expansión. Mi meta es llegar a 200 horas de juego, y después de eso, volveré a hundirme en el pozo de la desesperación sin internet.